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Cuidado y mantenimiento para tu Subaru
Comprar un auto nuevo Subaru es una inversión significativa y, para asegurar que tu vehículo se mantenga en condiciones óptimas, es esencial realizar un mantenimiento adecuado y regular. Aquí te brindamos una guía completa sobre los cuidados y el mantenimiento de tu Subaru para que puedas disfrutar de todas las aventuras que te esperan.
El motor es el corazón de tu Subaru y requiere de cuidados especiales para garantizar su buen funcionamiento y durabilidad. Aquí te explicamos cómo cuidarlo adecuadamente:
El cambio de aceite es una de las tareas de mantenimiento más importantes. Subaru recomienda cambiar el aceite y el filtro cada 15.000 kilómetros o un año, lo que ocurra primero, en los motores aspirados y cada 7.500 km o 6 meses para los motores turbo, lo que ocurra primero. Utilizar aceite de alta calidad garantiza que el motor funcione de manera eficiente y prolonga su vida útil.
El sistema de enfriamiento mantiene el motor a una temperatura óptima. Verificá el nivel de refrigerante cada mes y asegurate de que no haya fugas en el sistema. Te sugerimos tener en cuenta las recomendaciones de la libreta de garantía.
El filtro de aire del motor debe ser revisado y reemplazado cada 15.000 kilómetros. Un filtro de aire limpio mejora la eficiencia del combustible y el rendimiento del motor.
Cuando recibís tu nuevo Subaru, es fundamental realizar una revisión inicial después de los primeros 5.000 km para los vehículos aspirados y 7.500 km para los vehículos turbo. Durante esta revisión, se inspeccionarán componentes clave como el motor, el sistema de frenos y la transmisión. Es una oportunidad para detectar cualquier problema inicial y asegurarte de que todo funcione perfectamente.
Los neumáticos son una parte crítica de tu auto. Verificá la presión de los neumáticos al menos una vez al mes y asegurate de que estén inflados según las recomendaciones del fabricante. Además, la rotación de neumáticos cada 15.000 kilómetros ayuda a que se desgasten de manera uniforme y prolonga su vida útil.
Para mantener una conducción suave y segura, realizar la alineación y balanceo de las ruedas cada 15.000 kilómetros es esencial. Esto evita el desgaste desigual de los neumáticos y problemas de manejo.
El sistema de frenos es esencial para tu seguridad. Revisá los frenos regularmente y reemplazá las pastillas de freno cuando sea necesario. Si escuchás ruidos extraños o sentís vibraciones al frenar, llevá tu auto a un taller autorizado Subaru de inmediato.
La batería es crucial para el funcionamiento de tu Subaru. Verificá los terminales de la batería regularmente para asegurarte de que estén limpios y libres de corrosión. También es recomendable reemplazarla cada tres o cuatro años.
Mantener tu Subaru limpio no solo es estético, sino que también ayuda a preservar la pintura y proteger contra la corrosión. Lavá tu auto regularmente, especialmente después de conducir en condiciones de barro o nieve.
Las revisiones de seguridad son una excelente oportunidad para asegurarte de que todos los sistemas de seguridad de tu auto, como los airbags y los cinturones de seguridad, estén en perfectas condiciones.
Subaru mantenimiento ofrece un plan específico para garantizar que tu vehículo se mantenga en perfectas condiciones y puedas disfrutar de todas las aventuras que te esperan.
El mantenimiento adecuado de tu nuevo Subaru no solo asegura una mayor durabilidad del vehículo, sino que también garantiza tu seguridad y la de tu familia. Seguir estos consejos técnicos de cuidado vehicular te permitirá disfrutar de todas las aventuras que la vida te ofrece, con la tranquilidad de saber que tu auto está en excelentes condiciones.
¡Agendá ya tu próxima revisión en un taller autorizado Subaru y llevá tu experiencia de conducción al próximo nivel!
